Poesía...Julio Suárez Herrero Junio 1919
Pequeña niña de Palermo
dormida en tu ataúd en sueño eterno,
acompañada de horror y de silencio,
triste escenario que eligieron
los que pusieron allí tu joven cuerpo.
Yo quisiera ser como un Dios bueno
que con una palabra te despierta
y bajo la luz de un bello cielo
juegas feliz y no estás muerta.