Isla Negra y Neruda. (Chile)

Dejamos Viña del Mar y nos dirigimos a Isla Negra lugar donde se encuentra la casa donde vivió Pablo Neruda. Bautizado este lugar por el poeta al ver las rocas cercanas a su casa ha quedado el nombre de Isla Negra como el de una de sus tres famosas casas: La Sebastiana en Valparaíso, La Chascona en Providencia, Santiago y esta de Isla Negra.

Todo este lugar está repleto de recuerdos del poeta. Sus colecciones de mascarones de barcos, de caracolas marinas, de mariposas, de botellas, de postales con cierto tinte erótico...y en el jardín una gran barca en la que nunca llegó a navegar él que se consideraba "navegante de tierra".

Enterrados en el jardín están sus restos junto a los de su esposa Matilde, enfrente del mar que le trajo un día la tabla de madera, resto de un naufragio, con la que haría su mesa de escritorio.

Al no estar permitido fotografiar dentro de la casa, tan sólo en el jardín, me queda como recuerdo lo acogedor de aquél hogar donde vivió sus últimos días antes de ser llevado a Santiago y desde luego la melancolía que han dejado sus versos más famosos:

"Puedo escribir los versos más tristes esta noche. Escribir, por ejemplo: "La noche está estrellada,

y tiritan, azules, los astros, a lo lejos."

En el desierto de Arabia.

Hoy dedico un recuerdo a la serenidad del desierto que separa Abu Dhabi de la ciudad de AL-Ain llamada también la Ciudad Jardín de aquél Emirato.

En aquél viaje  eran la soledad y el silencio lo que más me atraía mientras mi vista se llenaba de las  dunas  que asemejaban inmóviles olas en el mar de arena.

 Transcurridos ya  años desde aquella experiencia aún me parece sentir sobre mi cabeza la fuerza del sol abrasador y la arena del desierto cediendo bajo mis pasos a medida que me alejaba del pequeño campamento donde en el momento de la frugal comida me veía acompañado por minúsculos ratoncitos que parecían surgir no sé de donde.

Llegaba la noche, refrescaba el ambiente y sentado en el espartano campamento acompañaba a los nativos mientras algunos de los integrantes del grupo  fumaban la pipa de agua y otros canturreaban una canción. En aquellas momentos volaba unos segundos con mi imaginación a la frenética actividad de la ciudad de Madrid con sus gentes caminando apresuradamente hacia  sus estrictos horarios de trabajo y  las calles repletas de coches.

Cuando cansados de caminar bajo el inclemente sol llegábamos a una pequeña aldea no era de extrañar que el recibimiento fuera generosamente acompañado por el ofrecimiento de cuencos de agua refrescante y no pocas veces carne de cordero recién sacrificado.

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NUEVA ORLEANS

Llegué por primera vez a Nueva Orleans en 1968. En aquella época y  en  Bourbon Street se podía tener aún la sensación de que estabas en un santuario del Dixieland jazz que originó música tan famosa como  "Basin Street Blues" y "When the saints go marching in".

En los últimos años hasta ahora sin embargo he asistido  con cierta nostalgia al cambio que ha experimentado la famosa calle. Han desaparecido aquellos bares donde  ya desde la acera se podía escuchar la inconfundible música del auténtico jazz. Abundan ahora los bares de copas con música moderna  y la calle está atestada de gente alegre y ruidosa.

Si buscamos un lugar más tranquilo pasearemos por la paralela Royal Street donde se encuentran las tiendas de los anticuarios.  Es en el "vieux carré" de Nueva Orleans donde gustaremos el sabor  típico de la ciudad

con sus reminiscencias de tiempos franceses y españoles. En los restaurantes  tendremos cuidado al encargar los platos que elijamos si no nos gusta el picante característico de la comida "creole ".

Al recorrer las antiguas calles con nombres aún en español quiza creamos escuchar al  inolvidable Louis Armstrong al oir el sonido de una trompeta escapando de alguno de los reductos de jazz que aún existen.

Bora Bora, Moorea, Tahiti.

Fotos Julio Suarez. Clic en las fotos para ampliarlas.

Sentía un especial deseo de llegar a las Islas Sociedad para poder visitar los lugares donde Paul Gauguin vivió una gran parte de su vida. En aquellos lugares paradisíacos pintó algunas de sus más famosas obras y convivió con las nativas que serían protagonistas de muchos de sus cuadros.

De las tres islas que visitamos me gustó especialmente Moorea aunque la fama de más atractiva y famosa corresponde desde luego a Bora Bora.

En Papeete en la isla de Tahiti su mercado ,lleno de actividad, ofrece numerosos recuerdos al visitante, pareos, colgantes , pinturas y una gran diversidad de artesanía local.
El Museo de Gauguin sin abundar en obras es interesante y nos muestra fotografías de la vida del artista que abandonó a su mujer e hijos para vivir en  Polinesia.

Merece la pena  recorrer la Isla de Moorea en moto o en un  pequeño coche parándose en la Bahía de Cook sin olvidar al ver sus bellos paisajes que en Moorea  situó el escritor James Michener la fantástica Bali-Hai.

Bora Bora nos brinda la transparencia de sus aguas tranquilas, la belleza de su laguna de aguas cálidas,y la calma de sus hoteles con bungalows sobre el agua. Como en otras islas también aquí podemos nadar cerca de los tiburones y rayas y acompañados de algún monitor atrevernos a darles de comer.

Matterhorn. Alpes suizos.

Desde Interlaken llegamos por carretera hasta el pueblo de Tasch. Alli debemos dejar el coche en un parking pues no dejan subir automoviles hasta Zermatt. Hay un tren cada 20 minutos en el que puedes trasladarte con el equipaje. El recorrido no dura mas de 20 minutos.

Desde Zermatt la vista del Matterhorn es impresionante. Se pueden divisar con claridad, si las nubes lo permiten, sus paredes rocosas en las que han perecido numerosos escaladores.

En el cementerio del pueblo hemos podido ver las tumbas de muchos de aquellos,algunos muy jovenes , con un pequeño comentario sobre el accidente motivo de su muerte, bien por un alud o por haberse despeñado.

EL trail del Matterhorn y del edelweis no deben dejar de experimentarse. Los hoteles, muchos de ellos en casas de madera tipicas, son confortables y con magnificas vistas.

En Graceland, Memphis.

En Memphis, Estado de Tennesee, se encuentra  Graceland, la casa donde vivió Elvis Presley y que Estados Unidos ha elevado al rango de Monumento Histórico Nacional.

Previamente a nuestra visita hemos estado en los Sun Studios donde el rey del rock grabó sus primeros discos. Unos cochecitos nos llevan hasta la entrada de Graceland  en grupos reducidos de visitantes. Debemos dejar a la entrada cámaras de fotos y videos antes de comenzar la visita.

Un recorrido por las habitaciones nos permite ver el  salón con su piano , la sala de billar, sus incontables premios y sin embargo no es posible subir al piso superior en cuyo cuarto de baño fué encontrado muerto Elvis  en 1977. Su tumba, siempre cubierta de flores, se encuentra en el jardín de la mansión.

Para los fans de Elvis y los amantes del rock es esta una visita obligada. Pero Memphis nos ofrece también su tradición de patria del  "Memphis blues" y el curioso ritual que pudimos contemplar durante nuestra visita al Hotel Peabody del baño de los patitos que bajan en el ascensor  todos los dias a las 11:00a.m  desde el último piso del Hotel hasta el lobby para bañarse en un pequeño estanque.

Más triste es contemplar el balcón del motel Lorraine donde fué asesinado Martin Luther King en 1968 por James Earl Ray.

En globo sobre Australia

En Alice Springs en el centro de Australia subimos a la avioneta que nos llevará hasta las cercanías de Ayers Rock o Uluru   la roca sagrada de los aborígenes.

Allí en medio del desierto australiano se encuentra este promontorio rocoso todo un símbolo para los  aborígenes . En sus paredes aún podemos ver las pinturas que hicieron a lo largo de siglos pasados.

El calor es sofocante y la subida a la cima de la roca la hacemos agarrados a una cuerda que como única protección nos sirve  de pasamanos. En la base de la roca se pueden ver numerosas cruces que señalan los casos en que la escalada terminó trágicamente.

Cerca de Uluru nos adentramos en Los Olgas, grupo asímismo de rocas donde un incidente ,debido a un golpe de calor, nos hace detenernos durante algún tiempo.

De madrugada abordamos el globo que nos llevará en un recorrido sobre estas tierras rojizas permitiéndonos ver en toda su belleza el desierto australiano y experimentar las emociones de un aterrizaje accidentado.

Dinamarca en el recuerdo

Texto: JulioSuárez Herrero

Clic en las fotos para ampliarlas.

Esta vez el viaje, a un lugar más cercano,  me lleva en mi recuerdo muchos años atrás. Dinamarca entonces tenía aún  el encanto que los cuentos de su famoso escritor Hans Christian Andersen nos habían transmitido.

 Recorríamos sus paisajes suavemente ondulados, con pequeños pueblos en los  que creíamos ver aparecer a un joven campesino llevando en su carro  hacia el molino de Mols a una inesperada visitante de la gran ciudad.

 Vivía en Copenhague , en donde sus habitantes utilizaban sus bicletas en mayor número que en la actualidad para trasladarse  a la cercana playa de Bellevue donde el Strand Hotel todavía existía. Un Copenhague en donde las mujeres de los pescadores aún vendían las capturas del día en Gammel Strand y el Tivoli no estaba aún invadido por oleadas de turistas de todo el mundo.

La gran inmigración que hizo de Copenhague una ciudad multicultural aún no se había producido. Las diferencias con nuestro país parecían agrandarse aún más con la distancia que, debido a las mayores limitaciones de medios y transporte de entonces, nos hacían ver a Dinamarca como un país lejano.

El paso del tiempo mejora o deteriora el encanto de algunos lugares. Yo dejo a los visitantes actuales que aún  puedan comparar ambas épocas que elijan la que prefieran, sin dejarse llevar por melancolías de tiempos pasados.

                                                      

4 dias en las Islas Galápagos.

Llegamos a la ciudad de  Guayaquil en Ecuador con el fin de tomar el avión que nos llevará hasta la Isla de Baltra en las Islas Galápagos. Estas islas pertenecen a Ecuador.

Embarcados en la motonave Santa Cruz con unos 90 pasajeros navegamos durante cuatro días visitando distintas islas de este archipiélago.

El recuerdo que nos deja este nuevo hito en el recorrido del mundo es el de la soledad de lugares y playas inhabitados en las que pueden vivir sin ser molestados los lobos marinos mientras las iguanas a centenares contemplan inmóviles el paso de los limitados grupos de  turistas , ocasionales intrusos de su entorno.

Nombradas "Reserva de la Biosfera", Isabela. Fernandina, Floreana  entre otras islas del archipiélago.... son nombres que evocan el pasado histórico de nuestro país. Con cerca de 2.000 especies únicas entre las 5.000 que allí se pueden encontrar, estas islas son un lugar ideal para la conservación de la flora y fauna en nuestro planeta.

Nota: Si queréis más información detallada del número y nombres de las islas seguid el siguiente link:

http://www.saberia.com/2009/12/cuantas-son-las-islas-galapagos/

En este link Jony envia la siguiente información: "Las Galápagos –oficialmente el archipiélago de Colón- son un grupo de 13 islas volcánicas, 6 islas de menor tamaño y 43 islotes, formados hace 350 millones de años como resultado de actividad meteórica en el lecho del mar. Las Galápagos se ubican a 

1.050 Km. de la costa de Ecuador, y forman parte de la región insular del país.

En el poblado de las mujeres jirafa.

Norte de Tahilandia. A unos 40 kilómetros de la ciudad de Mae Hong Song se encuentra el poblado en que viven las "padaung" o mujeres jirafa.

Ya desde la edad de 5 años les van colocando los anillos dorados  que poco a poco irán  dando a su cuello una longitud fuera de lo normal. Después de años con ellos no podrán quitárselos sin correr el riesgo de quebrar su cuello que no podría soportar ya el peso de su cabeza.

En el poblado, encontramos a una "padaung" que nos dice llamarse María José y habla aceptablemente en castellano. Intrigados le preguntamos donde lo aprendió. -Un poco cada vez,  escuchando a los turistas que nos visitan- nos contesta. Esta gente sabe sacar provecho en su poblado de la curiosidad de los visitantes de otros países. Allí se venden los recuerdos turísticos, hay huchas para donaciones y , como hemos visto en algún caso,  llegan a contestarnos en nuestro idioma.

Estas tribus huyeron de Birmania y han encontrado un nuevo asentamiento en el Norte de Tahilandia.

Isla de Pascua.

Si algún día quisiérais encontrar un lugar lo más alejado posible de las grandes ciudades y de la frenética vida actual de las mismas os sugiero la Isla de Pascua como destino.

No en vano “ el ombligo del mundo” como la llaman por su situación aislada en medio del Pacífico recibe aún hoy en día un número escaso de turistas en comparación con otros destinos más populares.

Caminad por sus prados contemplando los mohais y el mar en casi absoluta soledad, evitando los momentos en que algún pequeño  grupo de visitantes dispara sin cesar sus máquinas fotográficas. Son momentos de gran serenidad si no os asusta la ausencia de ruidos y gentes, tan sólo el murmullo del mar  que estrella sus olas contra el islote llamado motu Nui ,donde los nativos en tiempos pasados nadaban en reñida competición  para buscar el huevo del pájaro sagrado Manutara.

El cráter de Rano Raraku nos muestra en su ya extinguida caldera abundantes plantas de totora y en las laderas de sus colinas próximas se encuentran numerosos mohais que nunca se llegaron a terminar.

Tres vuelos semanales de Lan Chile  ( Santiago-Isla de Pascua-Papeete en Tahiti)  y un barco desde Valparaíso son el medio que nos ofrecen para llegar a este apasionante lugar.

Foto: Julio Suárez Herrero

Africa. Del Cabo de Buena Esperanza a Zimbawe.

Iniciamos nuestro viaje en SudAfrica para posteriorente atravesar Swazilandia y llegar hasta las Cataratas Victoria en Zimbawe.

En un bungalow cercano al Parque Kruger pasamos la noche. Al día siguiente un gran revuelo nos despìerta. Pensamos que los monos han vuelto a hacer de las suyas, desvalijando las pertenencias de algún viajero. Pero no, ha sido una turista imprudente que deseosa de hacer jogging junto al río próximo ha sido atacada por un hipopótamo.

Yace muerta junto a la orilla y nos confirman que aquellos animales son los más agresivos y peligrosos.

Continuamos la ruta y al atravesar Swazilandia el alma se encoge ante la pobreza del país.  No deja de dolernos el contraste del excesivo lujo del  hotel con la miseria que hace que estos lugares sean de los más pobres de la Tierra.

En Zimbawe interminables colas de mujeres con contenedores de plástico esperan horas para poder llevar agua de una fuente hasta sus chozas.

Queda en nuestra mente como última imagen el esplendor de las Cataratas Victoria  y flotando sobre sus aguas el recuerdo de Stanley y  Livingstone.

En los confines del mundo.

Patagonia. Usuhaia nos recibe con la bondad de una temperatura no excesivamente baja. El canal de Beagle se ofrece ante nosotros y nos imaginamos  ver la llegada del bergantín del mismo nombre con el joven naturalista Darwin como pasajero en su expedición en busca de nuevas especies.

En su antigua prisión queda el recuerdo de los prisioneros primeros pobladores de Usuhaia. El tren que los llevaba a sus trabajos forzados nos va mostrando  un bosque de árboles petrificados.

Embarcados en el  "Australis" ,cerca ya de la Antártida, el frío se hace cada vez más intenso.

 Hoy las condiciones del mar nos permiten desembarcar con lanchas de goma en el Cabo de Hornos.
 Un faro y una pequeña cabaña son el único signo de vida humana. Allí , a una distancia de cientos de kilómetros de cualquier lugar habitado, vive en soledad la familia que cuida el monumento y el faro.

Nos despedimos de aquél lugar en los confines de la Tierra con la satisfacción de haber podido vivir la experiencia de habler doblado el Cabo de Hornos ,uno de los lugares del mundo más peligrosos para la navegación.